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Reseña: Grim Fandango


Es gracioso pensar que nuestros vecinos del norte creen que los mexicanos celebramos el día de muertos en una suerte de desfile de San Patricio, pero con los rostros pintados de panda. A los extranjeros, más a los europeos, les sorprende nuestra forma satírica de ver a la muerte, de jugar con ella y de presumir la forma de burlarla. Por eso Coco, de Disney Pixar tuvo tanto éxito. Pero 19 años antes, en 1998, Double Fine (dirigido por Tim Shaffer) hizo uno de los juegos que mejor retrató la mitología de la muerte mexicana.

Grim Fandango es la historia de un empleado de una oficina encargada de llevar a los recién fallecidos por su camino al descanso eterno. Esta suerte de purgatorio tiene la apariencia de una ciudad de los años treinta, pero con toques que recuerdan al Mictlan de los aztecas. Lo característico es que este limbo es terriblemente burocrático y está lleno de corrupción, crimen y descontento. En medio de todos estos problemas, Manuel “Manny” Calavera, una parca encargada de vender paquetes de viaje a los recién llegados (basándose en sus méritos de su vida), se ve envuelto en la búsqueda de una mujer que emprendió el recorrido de cuatro años por el inframundo, cuando ella tenía derecho a hacer el que sólo duraba cinco minutos.


En esa persecución, el jugador, junto a Manny, se enterarán de las redes de corrupción que plagan al mundo de los muertos, será parte de un grupo rebelde liderada por un personaje que es la combinación de Fidel Castro, Ernesto “Che” Guevara y Charles De Gaulle, y se aprovechara de los problemas sindicales por los que cruzan las abejas obreras en las zonas portuarias, todo para abrirse paso hasta Mercedes Colomar y llevarla hacia su merecido descanso en el Noveno Infierno.

La jugabilidad es bastante sencilla. El personaje estará en un escenario pre-renderizado y el jugador tendrá que interactuar con lo que encuentre a su alrededor. De esta manera, se puede entender que la forma más optima de jugarlo es con un mouse, pues así se podrá entrar en contacto con objetos de forma más sencilla. Éstos servirán para resolver acertijos que irán apareciendo y que permitirán que algún personaje acepte cooperar. Muchos de ellos rayaránn en lo ilógico, haciendo que se vuelvan frustrantes. Pero no se preocupen, no tiene nada de malo usar una guía o pedir ayuda, pero siempre será más autocomplaciente resolverlos por uno mismo (o por pura suerte).


Su música es excelente para el tipo de ambiente que busca retratar. Son tonadas de jazz con ligeros toques mexicanos, que se apegan a la ambientación noir-folclorica que habitan nuestros personajes. En la versión remasterizada, se nota su mejora, pues con las técnicas actuales, la banda sonora está completamente orquestada y mejorada para el disfrute de los jugadores.

Las voces, por otra parte, sí fueron mejoradas, pero no regrabadas. Pusieron en practica la frase “si no está roto, no lo repares”, pues las actuaciones ya eran fantásticas en su natal 1998. Cada personaje es representado a la perfección y sus comportamientos y motivaciones son perfectamente diferenciables entre sí. Los villanos son graciosos, pero no planos, y los aliados que te vayas encontrando, te llegarán a agradar hasta el punto en el que sufrirás por cualquier desavenencia que les llegue a ocurrir.


Para estos tiempos en los que miramos al pasado en busca de inspiración o para retomar el buen contenido que podría ser olvidado, Grim Fandango es una de las mejores opciones. Su jugabilidad se puede sentir vieja, pero no arcaica, y su humor puede ser apreciado por los más elevados guionistas contemporáneos. Es uno de esos títulos que pueden ser tomados por cualquiera, pero sólo los más sabiondos notarán las referencias hacia las ilustraciones de José Guadalupe Posada o hacia la mitología azteca más allá de las pirámides.


Manny Calavera, Mercedes Colomar, Salvador Limones y Glotis, llevarán al jugador por un camino de descubrimiento y empatía; un sendero lleno de risas, crítica social y autos de alta potencia. Puede ser frustrante, pues pareciera que Tim Shaffer estaba un poco drogado cuando se inventó los acertijos, pero cuando digo que al final todo valdrá la pena, es porque no había sentido tanta satisfacción al terminar un juego hasta que vi el desenlace de la historia del Señor Calavera.

Disponible en Playstation 4, Xbox One, Nintendo Switch, Steam


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